Título: Enterrad
Autoras: Amie Kaufman y Megan Spooner
Páginas: 495
Editorial: Hidra
Sinopsis: La Tierra ha recibido un mensaje de una antigua raza alienígena: los eternos. Jules y Amelia se han desplazado, junto con otros grupos de aventureros, hasta el lejano planeta del que procedía la transmisión. En el templo de los eternos les aguardan trampas y peligros, y la oscura verdad sobre los eternos y su misterioso y codiciado tesoro.
Desde que los Eternos, una raza alienígena procedente del planeta Gaia, mandaron un mensaje a la Tierra advirtiendo a los humanos del gran poder que esconden en su planeta, son muchas las personas que han viajado a este extraño mundo dispuestas a encontrar y descubrir ese secreto. Entre ellos están Jules y Amelia, dos jóvenes de 17 y 16 años. Jules es el hijo de Elliott Addison, quien solía ser el mayor experto de los Eternos, hasta que terminó en la cárcel por revelar información que no le interesaba a la Alianza Internacional que el resto de la población supiera. Es por eso que Jules ha viajado a Gaia decidido a seguir los pasos de su padre y descubrir si lo que decía era o no verdad. Por otra parte, Amelia es una saqueadora, ha ido a Gaia a entrar en los templos de los Eternos para conseguir objetos valiosos y así poder "recomprar" a su hermana, que al ser una niña ilegal (debido a una ley que no permite tener más de dos hijos por la sobrepoblación mundial) tiene que trabajar en un pub como camarera, pero cuando los 18 años le espera un destino mucho peor.
Los caminos de Jules y Amelia se cruzan cuando ella es embestida por un par de saqueadores, que no lejos de acogerla con cariño en su equipo, están dispuestos a matarla si hace falta. Es en ese momento cuando Jules aparece pensando que son miembros de su expedición (sí, el chaval está perdido en un planeta alienígena y decide acercarse a dos personas que están apuntando con un arma, no tiene muchas luces) y se lleva una sorpresa al ver que, obviamente, no lo son. Por suerte, ambos pueden escapar y a partir de ese momento continúan su viaje juntos.
Pero cada uno lleva un camino distinto, Amelia, como bien he dicho antes, quiere ir al templo principal a conseguir objetos de valor, en cambio Jules, va directo a un templo que todavía no ha sido explorado porque sólo su padre y algunos miembros de la Alianza Internacional conocen su existencia, ya que esta información la descubre su padre en una segunda capa de ese mensaje que enviaron los Eternos. Jules engañará a Amelia diciéndole que en ese templo también podrá encontrar algo con lo que conseguir dinero, aunque realmente, no tiene claro de que vaya a ser así.
Finalmente, cuando lleguen al templo de los Eternos, tendrán que resolver diversos misterios y enigmas para conseguir llegar al final, pero no solo eso, ya que también deberán enfrentarse a personas sin escrúpulos dispuestas a matar a cualquiera que se interponga en su objetivo final: robar todos los tesoros extraterrestres.
"A millones de años luz de casa, de pie en la superficie de un planeta alienígena, y no me había dado realmente cuenta hasta ahora de que la cosa a la que más debía temer en este lugar sería a otro ser humano."
Como podéis ver, la historia se centra en los personajes de Jules y Amelia. Son muy muy diferentes entre ellos. Por un lado, a Jules podríamos calificarlo como el típico sabelotodo que siempre tiene que tener la última palabra. Tiene pinta de pringadillo pero es de esos a los que al final le coges cariño. Por otra parte, Amelia es totalmente al revés. Lleva el pelo teñido de colores, no tiene mucha cultura porque dejó de ir a la escuela a los 13 años y no tiene recursos económicos sobre los que apoyarse. Es muy divertida y le encanta la ironía, creo que por eso termina estableciendo ese lazo con Jules, porque aunque el chico es un cerebrito, tiene esa chispa juvenil en común con ella.
A rasgos generales, ambos me han caído bien. Lo que más me ha gustado es que están construidos de manera muy real y natural, como dos chicos de 16 y 17 años en la edad del pavo. Se miran el uno al otro con ojitos y hasta pensamientos sucios en ciertos momentos que te hacen pensar "aw, pero míralos que tontitos están". Son muy adorables y tienen una historia detrás bien construía que apoya la manera que tienen de actuar. Aún así, creo que me hubiera gustado ver más los sentimientos y emociones de Amelia, que en comparación a los de Jules se me han quedado un poquito cortos.
La historia se desarrolla el 90% en los templos, algo que me ha sorprendido porque iba con la idea de que las autoras nos presentarían un nuevo planeta alienígena pero no ha sido así. Que ojo, me ha gustado igual, simplemente tenía una percepción diferente de lo que sería la historia. He disfrutado mucho, sobretodo al final, que me ha dejado con ganas de leerme el segundo libro ya de ya. Pero bueno, tendré que sufrir un poquito y esperar.
*Gracias a Hidra por el ejemplar